lunes, marzo 10, 2008

De cómo hacer cosas originales con poco tiempo.

El viernes volvía a casa en el colectivo. Más precisamente en el 132, que es una línea mágica... quien la conozca (con excepción de Vir que parece que tiene un mal de ojo contra esa línea) entenderá que es una línea de colectivos realmente excepcional. Pasa un bondi por minuto, sin exagerar, y a veces dos o tres por minuto. Y eso que tiene dos ramales distintos. Nunca voy a entender cómo una línea así puede existir acá en Buenos Aires... de hecho, me parece completamente incoherente la frase "Llegué tarde porque el puto 132 no venía más"... si algún empleado mío me dice eso lo echo por incompetente y mentiroso... y también porque me parece que me estaba robando guita de la caja... las cuentas no daban y siempre faltaba plata, y casualmente él era quien cerraba el local... el otro día encima me dejó las luces prendidas, un quilombo... me va a venir una cuenta de luz de la puta madre, que la pague él, qué se cree? Y si me llega a hacer juicio por la indemnización le pego tres patadas en el orto. Así de simple, nada de mediación, nada de abogados. Tres patadas en el orto y que se vaya a cagar. Forro.

Y entonces volvía a casa en el 132, y en un semáforo, el colectivo se para (sí, digo esto porque, en esta puta ciudad, que un colectivo frene en un semáforo en rojo es algo realmente destacable). Mientras espero que siga su rumbo, miro por la ventanilla, porque realmente muchas cosas más para hacer no hay.
Y ahí la veo...
Yo, como buen conductor que soy, sé bastante bien que durante los semáforos, la gente hace las cosas más insólitas para pasar el tiempo... algunos acomodan el espejito retrovisor, otros aprovechan para contestar un mensajito de texto, otros simplemente miran al frente como zombies hasta que el semáforo cambie, otros hacen lo mismo que hice yo, es decir, mirar por la ventanilla... pero lo que esta mina estaba haciendo, me pareció de lo más original y bizarro...
La mina estaba tejiendo...
Sí, tejiendo... con las agujas, el ovillo de lana y las mangas del pulover colgando... mientras esperaba que el semáforo se ponga en verde, daba una puntada, y otra, y otra... tiraba más cuerda del ovillo, daba otra puntadita... cuando veía el semáforo peatonal titilar, dejaba las agujas, dejaba todo y volvía a poner atención. Después, unas cuadras más adelante, si la agarraba otro semáforo, de nuevo... agujas en mano, ovillo colgando y dele que dele...
¿A quién se le ocurre tejer mientras espera que cambie el semáforo? Realmente... esos momentos son para actividades cortas, no para ese tipo de cosas... mirá si yo cada vez que saliera con el auto, me llevara un libro para leerlo durante los semáforos...
Si hiciera eso, tendría que llevarme uno tipo el Código Da Vinci, que tiene capítulos de dos hojas, ideales para semáforos...

Hey! Debería sacar una colección de libros... "Libros para el semáforo"... me llenaría de guita... puta, qué buenas ideas salen de este blog...

11 comentarios:

Anónimo dijo...

Pará che, ¿qué la bardeas? Estaba aburrida, y se me dió por ponerme a tejer... es mejor que escarbarse los mocos!
Aparte tengo un sobrinito en camino, el invierno que se viene, y le tengo que hacer un abrigo!

Y tengo auto!!!!
Y vos no!!!
Ojalá la frecuencia del 132 entre en decadencia y te joda los horarios, por mal tipo.


Firma: la mujer de la lana.

Cosme Fulanito dijo...

Si sos vos, para qué decís "Qué LA bardeás"? Hablá en primera persona... y tengo auto... y me importa poco la frecuencia del 132, no lo tomo nunca... y tu sobrinito va a nacer deforme por culpa del cornudo de tu hermano/cuñado...

Anónimo dijo...

Sos malo eh...

...mirá si la pobre mina estaba terminando un pullover para un alguien que estaba a punto de morir y esa era su última voluntad???

Y vos, ahí, desde el 132 pensando mal de la pobre mujer...

Horrible!!


Igual, de todas las cosas que no se me hubiesen ocurrido para la espera de un semáforo, tejer es sin dudas la mejor...


Muy grosa, señora, la felicito!



Saludos!
Inés (que se hizo un blog y no se acuerda el nombre y tiene q seguir siendo Anónimo...)

Anónimo dijo...

I ♥ 132.

Excepto alguna rara ocasión cuando me hacía llegar tarde al entrenamiento de volley. Pero bueno, al 132 se le perdona todo. Hasta que venga llenísimo. Es una lástima que me deje un poco lejos del laburo, porque lo tomo para ir a cualquier otra parte.

Nunca vi a nadie tejer durante los semáforos en rojo O.o Eso me da una idea... si alguna vez me compro un auto, me llevo un ovillo de lana y una aguja de crochet. Si alguna vez tengo que cruzar la barrera de Nazca me hago un pullover entero.

Eso en realidad no jode. Lo que sí me jode es cuando van tejiendo en el colectivo y están a esto de clavarte una aguja en el ojo, o en el brazo o en la nariz o en cualquier lado.

Unknown dijo...

si estás en la parada del 132 y tarda más de cinco minutos, asustate, porque lo próximo que veras pasar es a los cuatro jinetes del apocalipsis.

Esa línea esconde algo, es demasiado perfecta (además todos sus colectivos son nuevos y limpitos)

Anónimo dijo...

Vos porque evidentemente no la conocés a Laura...se ponía a tejer mientras esperaba al profesor que viniera, antes de cada clase...a las 9 de la mañana!!!!! Seguro que era ella que se compró un auto.
Y una vez vi a una tipa tejiendo en un bondi HASTA LAS PELOTAS de gente, y ella lo mas campante iba tejiendo...

Que mas?? Ah, si, yo soy la unica persona en el mundo que puede decir que vio tardar el 132, deberían sacarme fotos, exponerme en museos, porque soy única. Lero lero, babosos!

Marita dijo...

En mi puta vida me tomé el 132 y no se tejer... no me siento nada identificada con el post... En cambio con lo de robar guita de la caja...

Y dale que la próxima vez que te diga que voy al medico y que me desees suerte, y a partir de ese día no te conteste mas los mail, te preocupabas? Me siento querida, en serio... (te estoy firmando para que sepas que estoy enojada, te va a costar, que lo sepas...)

El Conde de Dinamarca dijo...

Nunca me lo tomé!!! Ahora me voy a mudar a 4 cuadras del 132, así que lo primero que voy a hacer va a ser tomármelo así entiendo el posteo (¿?).

Aguante el 109 y sus bondis-telo.

Unknown dijo...

que grande, te firma el conde de dinamarca...

Anónimo dijo...

Creo que...


nah... mejor no creo.


A mi anotame con amasar mocos... No se... tienen onda...

Bah... pero no los que estan como muy.... blandengues.
Por que los muy blandengues al final terminan pegoteandote los dedos y no llegas a agarrar la caja de cambios a tiempo... incluso corres el riesgo de quedarte con la palanca de cambios pegada en la mano...
Y no da entrar al laburo con la palanca de cambios en la mano... nadie te va a creer lo que te paso y decididamente te van a mirar medio rarito... QUIEN ENTRA A SU TRABAJO CON UN ELEMENTO FALICO COMO ESE EN SU MANO???!?!?!?

En fin... sera por eso que debo comprarme una moto (igual se re complica tejer o sacarse los mocos con el casco.










Posta que te hace pensar esto... Igual... ojo las palomas.

Anónimo dijo...

Como tejedora que he sido, puedo decirte que lo de esta mujer es re contra entendible. Tejer es ADICTIVO, como lo has leído, no podes parar! cada momento que tenés al pedo, tus manos buscan como locas su tejido, y ya no hay muchas otras cosas que hacer mientras este ese tejido a tu lado.

Despues, quizás tengas suerte, y como a mi, se te vaya por un tiempo.