lunes, enero 31, 2005

De cómo usar los comentarios del post anterior para escribir este.

Veamos ahora lo que pasa del otro lado del mostrador. Cuando el arrogante, el agrandado, el que se las sabe todas, no es quien atiende el negocio, sino el cliente que va a hacer una compra. En este caso, al no haber atendido jamás un negocio en mi vida, dificilmente pueda hablar desde la experiencia... pero no importa, veamos qué sale.
El hombre entra al negocio, dispuesto a comprar lo que sabe que necesita, pero se encuentra siempre con aquél empleado nuevo, que lo único que te puede decir con seguridad es si va a llover o no, y eso es porque leyó el diario antes de salir de casa. En este caso, la pobre criaturita de Dios que aguarda tras el mostrador, se pone nervioso, porque quiere satisfacer a su cliente, pero su corta experiencia en el rubro aún no le dió los conocimientos necesarios como para saber ubicar con exactitud dónde es que se encuentra el "tensionador milimétrico de tres capas WV200,3". Agarra el catálogo, se fija bajo la T, y, por supuesto, encuentra todo tipo de tensionador, excepto el que el cliente quiere... luego de 20 minutos de minuciosa búsqueda, el futuro comprador señala por encima del hombro del muchacho y dice "Eso es lo que estoy buscando"... flaco, si ya lo viste antes, por qué tenés que hacer sufrir al pobre pibe buscando hasta el infinito?
Por el contrario, y acercándome más a los casos que maneja mi querida amiga malagueña (salerosa), cuyo nombre, por cuestiones de seguridad, voy a obviar; tenemos al cliente que no sabe nada, pero nada posta, eh... entra a una carnicería diciendo "Hola, quiero carne". Menos mal, al menos le pegó al lugar indicado, mirá si decía lo mismo en un consultorio ginecológico...
El vendedor se le acerca con su mejor cara de "Cagamos, me tocó un idiota, pero debe tener papota, así que tratémoslo bien"...

Vendedor: Buen día, caballero. ¿Qué clase de carne desea?
Cliente: Para comer.
Vendedor: (inserte aquí reacción típica ante semejante respuesta) Sí, pero de qué tipo? ¿De cerdo, vacuna?
Cliente: No, vacuna no, odio las agujas (agarra un pastel y se lo estrola en la cara)
Vendedor: (cara de "Dios mío") ¿Entonces quiere carne de cerdo?
Cliente: No, quiero hacer un asado.
Vendedor: Ah, bueno, entonces lo que va a necesitar es una tira de asado, vacío, riñones, molleja...
Cliente: Sí, envolvelo para regalo y ponele "Con amor".
Vendedor: Señor, no somos un Todo por $2. ¿Cuántos kilos va a querer de cada cosa?
Cliente: Y... ¿Cuánto voy a comer?
Vendedor: ¡¡¡Y yo qué sé, pelot... ehhh... no sabría decirle, señor, depende de cuánta gente sea.
Cliente: Yo soy uno solo, y creo que cada uno de mis invitados también lo es. Excepto Paco y Pedro, el de la doble personalidad.
Vendedor: Señor, llévese estas habichuelas mágicas y listo.
Cliente: ¿Con esto alimento a todo el mundo?
Vendedor: Sí, le dije que son mágicas, adiós.

No quiero usar el término "darle la razón como a los locos", pero con estos tipos la única forma de no perder la paciencia es... bueno... aceptando sus argumentos sin darle mayor importancia, a la manera de si con una persona no cuerda se estuviera tratando.

3 comentarios:

Marita dijo...

Claro, tanto agradecimiento por aca, agradecimiento por alla, y a mi nada! Esto no es justo!!! Quiero mi credito!!!!
Y si, esto se acerca mas a lo que yo sufro todos los dias. Si a vos Pablito te da dolor de cabeza tratar conmigo, cuando te pregunto algo de computacion, imaginate la bronca que siento yo cuando vienen los pelotudos a decirme que quieren usar "el internet". Lo peor es que esta gente no tiene la mas puta idea de como se usa una maquina, y suponenen que yo estoy aca para enseñarles. Pues suponenen mal.
O, tenemos el tipico caso del Nigeriano "me llevo el mundo por delante y no me importa que estemos en España, todos deberian saber mi idioma porque yo soy lo mas". Este especimen entra a la tienda y dice como si todo el mundo hablara ingles: "Give me a card". La frase en si muy dificil de entender no es, pero, yo con toda mi bronca contesto: "AH?" Y el señor insiste con el ingles. "No te entiendo" contesto yo, que si lo estoy entendiendo, pero soy asi de guacha nomas. El señor se repite, en ingles, pero mas lento. "Nop, ni idea de lo que me decis macho eh", ahora ya deje de usar Español, y cambie a Argentino como para hacerle la tarea mas dificil. Algunos se cansan de mi y se van sin comprar nada y esos son los casos que mas satisfaccion me dan. Si venis a España loco, aprende español, y si no jodete.
Me fui a la mierda, mejor dejo de escribir. Listo.

Cosme Fulanito dijo...

Vos deberías ponerte tu propio blog, Marita... contando todas estas cosas...

Ahora, ta bien que te hayas divertido con el negro y te hayas hecho la que no entendés, pero sos consciente que si el quía se va ofendido, vos te perdés una venta?

Marita dijo...

No trabajo a comision Pablito, me chupa un huevo... Y no lo hice una vez, lo hago siempre...